El término pommelier proviene de la palabra francesa «pomme», que significa manzana, así que, si sabemos que un sommelier es un profesional especializado en el mundo del vino, podemos deducir que un pommelier es un profesional especializado en todo lo relacionado con la manzana y las bebidas elaboradas a partir de ella, especialmente la sidra.
El pommelier es un profesional que tiene conocimientos profundos sobre las sidras, su producción, su cata y su maridaje, y es capaz de asesorar y guiar a los clientes en su elección de sidra de acuerdo a sus gustos y el tipo de comida que vayan a consumir. Sabemos que la sidra tiene una historia que se remonta a miles de años, pero la figura del pommelier es relativamente nueva.
Esto no quiere decir que hayan faltado expertos en sidra, o sumilleres de sidra, especialmente en regiones productoras como Asturias, el País Vasco o Normandía, sólo que no tenían una denominación oficial. La profesión de pommelier comenzó a tomar forma a finales de la década de 2000 y principios de 2010, cuando la industria de la sidra empezó a recibir mayor reconocimiento a nivel internacional y el interés por la sidra creció significativamente, especialmente en mercados como Estados Unidos y algunas partes de Europa.
Fue la American Cider Association (Asociación de Sidra de Estados Unidos) la entidad que formalizó y estructuró la certificación de Pommelier como una categoría profesional en el ámbito de la sidra. El primer nombramiento oficial de un Pommelier certificado se realizó en 2012, como resultado de los esfuerzos de la asociación para crear un estándar profesional y educativo para los expertos en sidra. No conocemos quién fue el primer pommelier certificado de la historia, pero sí sabemos quién es el primer pommelier español.
Se llama Haritz Rodríguez, un donostiarra que acaba de hacer historia en el mundo de la sidra al convertirse en el primer pommelier certificado de España, el máximo galardón a nivel mundial en este sector. Este título, otorgado por la American Cider Association, es un reconocimiento de élite que sólo poseen 122 personas en todo el mundo.
Este título lo ha recibido justo al comenzar la temporada de sidra en el País Vasco y este año tiene previsto realizar varias catas de sidras locales e internacionales, entre otras acciones con las que confirmar que la sidra tiene un potencial enorme, y es fundamental contar con personas que sirvan de puente entre el productor y el consumidor.
En este sentido, el papel de los pommeliers es clave, ya que ayudan a contar las historias detrás de cada botella, promoviendo su difusión y aprecio en el mercado. A pesar de que la producción y el consumo de sidra siguen siendo muy inferiores a los del vino y la cerveza, hay que reconocer que está experimentando un crecimiento considerable, sobre todo en países en los que no tienen tradición y entre los jóvenes que valoran que es una bebida con menos alcohol que el vino, y sin gluten.
Actualmente existen 22 denominaciones de origen e indicaciones geográficas para la sidra, las regiones tradicionales productoras incluyen el Reino Unido, Bretaña y Normandía en Francia, Hesse en Alemania, Austria o Gales, así como Asturias y el País Vasco en España. Sin embargo, en países donde la tradición sidrera se había perdido, la producción está resurgiendo, véase Estados Unidos, Madeira, Galicia, Cantabria e incluso en Sierra Nevada y las Islas Canarias.
¿Cuáles son las funciones principales de un pommelier?
✔Selección de sidras: Asesorar sobre las diferentes variedades de sidra disponibles, incluyendo las procedentes de distintas regiones, las variaciones en el sabor, y los diferentes métodos de elaboración.
✔Cata y evaluación: Evaluar las sidras en términos de su sabor, aroma, textura y apariencia, para recomendar las mejores opciones según el contexto y las preferencias del cliente.
✔Maridajes y armonías: Sugerir qué sidra marida mejor con distintos platos, similar a cómo un sommelier recomienda vinos. Esto implica conocer bien las características de las sidras (secas, dulces, afrutadas, etc.) y cómo estas pueden complementar o equilibrar los sabores de la comida.
✔Educación y promoción: Enseñar a los clientes y al personal de los restaurantes o bares sobre las sidras, sus diferencias y cómo disfrutar de ellas. También pueden realizar catas o eventos para educar sobre la sidra.
Sabiendo qué es un Pommelier, es interesante conocer que para alcanzar este objetivo se debe realizar una formación rigurosa, tanto teórica como práctica. Los candidatos deben estudiar diversos aspectos de la sidra, como su historia, métodos de producción, variedades de manzanas y regiones productoras. También deben desarrollar habilidades sensoriales avanzadas para identificar y describir las características de la sidra de manera experta. Y tras completar la formación, los aspirantes deben aprobar exámenes, también teóricos y prácticos, que incluyen el análisis sensorial de diferentes sidras.
Foto 1 y 2 | Prensa
Foto 3 | Depositphotos
