El sistema alimentario global y su industria agrícola podrían causar tanto calentamiento global como el de la actividad humana

Una nueva investigación apunta que el sistema alimentario global y la industria agrícola que lo abastece, podrían causar tanto calentamiento global como el de la actividad humana, fruto de la industrialización. Los expertos sugieren un cambio en el modelo de producción y gestión de los alimentos, así como el seguimiento de una dieta sana y equilibrada, para reducir el impacto que tienen los alimentos en las emisiones de gases de efecto invernadero.

Alimentos y calentamiento del planeta

Según un estudio realizado por expertos del Departamento de Ciencias Ambientales y de la Tierra de la Universidad de Columbia (Estados Unidos), el actual sistema alimentario global y su industria agrícola podrían causar tanto calentamiento global como el de la actividad humana desde el inicio de la revolución industrial. A las emisiones de gases de efecto invernadero que han provocado un aumento de la temperatura del planeta, fruto de la actividad humana desde la época preindustrial, hay que sumar las emisiones que genera el sistema alimentario, que podrían incrementar en 1º C adicional la temperatura, lo que es suficiente para que se superen los objetivos climáticos globales que se establecieron en el Acuerdo de París sobre Cambio Climático.

No es sólo la producción de carne, la producción de alimentos vegetales también contribuye de forma significativa al calentamiento global, de ahí que se plantee la necesidad de analizar la forma en que cultivamos, comemos y cómo manipulamos el desperdicio alimentario. Los expertos explican que considerar el impacto ambiental que tienen nuestros alimentos es importante, sobre todo para los próximos años y con el propósito de garantizar la seguridad alimentaria a la vez que se intenta mantener un futuro climático más seguro.

En esta nueva investigación, los expertos han analizado las evaluaciones sobre la contaminación que contribuye al aumento de las temperaturas y que deriva de la producción de diferentes alimentos. Posteriormente se realizó un modelo predictivo sobre la contribución al calentamiento global de cada alimento analizado hasta el año 2100, los resultados mostraron que con el actual sistema alimentario y agrícola, y el modo en el que los humanos consumimos los alimentos, la temperatura global podría incrementarse en casi 1º C más de lo previsto. Los investigadores destacan que unos pocos alimentos son responsables de nada menos que el 75% de ese calentamiento, ya que se trata de alimentos que son fuente de metano, un gas de efecto invernadero que contribuye en el calentamiento del planeta, y su efecto es hasta 80 veces más potente que el del CO2 a la hora de retener el calor.

En varias ocasiones hemos hablado de la producción de carne y su contribución al calentamiento del planeta, de hecho, es el segmento alimentario con mayor contribución, le sigue a continuación la producción de arroz y el grupo de los productos lácteos, dos contribuyentes significativos en las emisiones de metano. Hablando del arroz, se trata de un cultivo ideal para que los microorganismos productores de metano proliferen debido a que se cultiva en campos inundados. Pero, a pesar de ello, la huella de los alimentos vegetales es mucho menor que la huella de los alimentos de origen animal.

Al respecto, recomendamos retomar la lectura de este post en el que hablábamos de un informe realizado por la organización Oxfam Internacional, en él se destacaba que sólo la producción de soja, arroz, maíz, aceite de palma y trigo, generan más emisiones de gases de efecto invernadero que los producidos de forma individual por casi cualquier país del mundo, y como se puede observar, sólo se hablaba de cinco alimentos vegetales. En el caso del arroz, recordemos que se trabaja en soluciones concretas como, por ejemplo, el desarrollo de una nueva variedad denominada SUSIBA2, que apenas genera gases de efecto invernadero, de ello hablábamos aquí.

Como contribuye al calentamiento del planeta la producción de alimentos

En este nuevo estudio, los expertos destacan tres pasos que se deberían seguir para limitar la generación de gases de efecto invernadero asociados a la producción alimentaria, pasos que permitirían reducir dicha contribución en más de un 50%. Pero, sin duda, lo más complicado es que los seres humanos alteren su forma de comer para adaptarse a la reducción del riesgo climático, los expertos no piden extremos como ser vegetarianos, simplemente siguiendo las recomendaciones de una dieta sana y equilibrada, ya se favorece la reducción de emisiones asociadas a la producción de alimentos.

Los investigadores apuntan que una reducción del 55% en la contribución que realiza la producción alimentaria al calentamiento global, se basa en que la población siga las recomendaciones de la dieta saludable de la Escuela de Medicina de Harvard, aunque también se pueden citar otros modelos de dieta, como la Dieta Mediterránea. Y claro, seguir una de estas dietas implica reducir el consumo de carne, aumentar el consumo de legumbres y de otros alimentos vegetales, lo que además beneficia significativamente a la salud.

Antes hemos citado el desperdicio alimentario, y es que, además de cómo se producen los alimentos, se debe tener en cuenta cómo se tratan los desperdicios, recordemos que según los estudios, un tercio de la producción mundial de alimentos se pierde o se desperdicia, siendo otro potencial contribuyente a las emisiones de metano. Reducir el desperdicio es otro tema crucial y se puede llevar a cabo con una serie de esfuerzos y pequeños cambios, la reutilización, la conversión de los desperdicios, reducir el tamaño de los paquetes de alimentos, mayor concienciación de la población, etc.

Finalmente destacar que los investigadores apuntan que existe demasiada obsesión con las soluciones tecnológicas, y cierto es que la tecnología tiene un papel muy importante, pero debe considerarse de manera integral, ya que podría propiciar que se ignoren políticas y otras intervenciones del comportamiento, y es que todo suma a la hora de reducir todo aquello que favorece el aumento de las temperaturas. Para los expertos, el cambio climático es un problema muy grave y tan urgente, que nunca habrá una panacea.

Podéis conocer todos los detalles de la investigación a través de este artículo publicado en la revista Nature Climate Change.

Foto 2 | James Almond

Deja una respuesta

Los comentarios en esta página están moderados, no aparecerán inmediatamente en la página al ser enviados. Evita, por favor, las descalificaciones personales, los comentarios maleducados, los ataques directos o ridiculizaciones personales, o los calificativos insultantes de cualquier tipo, sean dirigidos al autor de la página o a cualquier otro comentarista. Estás en tu perfecto derecho de comentar anónimamente, pero por favor, no utilices el anonimato para decirles a las personas cosas que no les dirías en caso de tenerlas delante. Intenta mantener un ambiente agradable en el que las personas puedan comentar sin temor a sentirse insultados o descalificados. No comentes de manera repetitiva sobre un mismo tema, y mucho menos con varias identidades (astroturfing) o suplantando a otros comentaristas. Los comentarios que incumplan esas normas básicas serán eliminados.

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

INFORMACIÓN BÁSICA SOBRE PROTECCIÓN DE DATOS:

Responsable: Gastronomía & Cía
Finalidad: Gestión de suscripciones al blog y moderación de comentarios
Legitimación: Consentimiento del interesado
Destinatarios: No se comunicarán los datos a terceros, salvo por una obligación legal.
Derechos: Acceder, rectificar y suprimir los datos, así como otros derechos, como se explica en la información adicional.
Información adicional: Puede consultar la información detallada sobre la protección de datos aquí.