El IVA, menudo invento… un impuesto sobre el valor añadido a todo lo que compramos, incluso de lo que nos permite seguir con vida, como los alimentos. ¿No es la alimentación un derecho humano? Y encima cada vez sube más, ya nos estamos preparando para el ascenso que se impondrá a principios de año. Sobran argumentos para que este impuesto no repercuta en la alimentación, y hay quien está trabajando en ello, la Asociación Española de la Industria de Panadería, Bollería y Pastelería (Asemac) reclama la exención del IVA para el pan.
Es cierto que sobre muchos alimentos pesa el IVA superreducido (4%), pero la patronal se ha dirigido al presidente del Gobierno con varios argumentos con los que pretende, no sólo que se haga caso omiso a la Comisión Europea de eliminar los tipos de IVA reducidos y superreducidos, sino que se retire el impuesto sobre un alimento básico como es el pan. ¿Creéis que es una batalla perdida?
Todos conocemos la importancia del pan en una alimentación saludable, del mismo modo que somos conscientes de que el consumo de pan ha descendido considerablemente, y parece ser que con más diferencia en España. El sector panadero afirma que nuestro país es el que tiene las cifras más bajas de la Unión Europea en relación al consumo de pan.
Asemac ha presentado al presidente del Gobierno una carta en la que explica las razones por las que se solicita la exención del IVA para el pan (y que con las mismas razones, se podría hacer con muchos otros alimentos), además de lo argumentado anteriormente, es un alimento de primera necesidad. Estamos en época de carestía económica, y el pan es uno de los alimentos más económicos en relación con su valor nutricional, es ideal para que forme parte de una dieta equilibrada.
Pero como comentábamos, su consumo se ha reducido (de 134 kilos por persona y año en 1964, a 45 kilos por persona en 2010) y buena parte de culpa es de la pérdida de calidad y de los mitos existentes, como que el pan engorda. Esta reducción de consumo, entre otros hábitos de la sociedad, están conduciendo a una salud pública deficiente.
Otro punto de valor para eximir al pan del Impuesto Sobre el Valor Añadido se relaciona con la economía, y es que el sector del pan es ‘un importante dinamizador de la economía española, ya que genera un volumen de empleo superior a las 336.000 personas, lo que supone casi el 30% del empleo total de la industria alimentaria’.
Y además afirman: «Entendiendo que el sector del pan puede aportar claras ventajas económicas, sociales y sanitarias en situaciones de crisis como la actual, la Junta Directiva de ASEMAC reclama a la Administración una exención del IVA, sobre todo cuando comprobamos que actividades tales como las apuestas y el juego ya gozan de este beneplácito. La Ley 37/1992 del Impuesto sobre el Valor Añadido establece en su art. 20. Uno. 10º que están exentas de IVA: Las loterías, apuestas y juegos organizados por el Organismo Nacional de Loterías y Apuestas del Estado, la Organización Nacional de Ciegos y por los Organismos correspondientes de las Comunidades Autónomas, así como las actividades que constituyan los hechos imponibles de la tasa sobre rifas, tómbolas, apuestas y combinaciones aleatorias o de la tasa que grava los juegos de suerte, envite o azar».
Sin duda, este tema puede abrir un amplio debate, y nos alegra conocer que ASEMAC (perteneciente a la Association Internationale de la Boulangerie Industrielle (AIBI) y a la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB)), defienden los intereses de la industria española de panadería y en consecuencia, de la sociedad. Nos surge la pregunta de si esta exención del IVA en el pan, también contempla que se elimine el impuesto de la harina, ¿qué opináis?, ¿cómo valoráis esta iniciativa?
2 comentarios
Interesante la iniciativa. Incompletísima, sin embargo.
¿Sabíais que el pan sin gluten se grava con un impuesto del 8%?
Claro: para todo el mundo el pan es un artículo de primera necesidad, menos para los celíacos, que no tienen otra medicina más que comer sin gluten.
Producto de «primera necesidad» cuyo precio, sin gluten, se multiplica por 5 (y de ahí para arriba). En una casa con 2 celíacos comer pan se convierte en un lujo. Saludos y gracias.