Posiblemente habéis estado en algún restaurante tex-mex que os haya ofrecido comer una ensalada servida en un bol de tortilla mexicana crujiente, también se utilizan estas tortillas para hacer cuencos o cestas que se rellenan con guacamole u otras elaboraciones culinarias. La idea es sencilla, hacer que el recipiente también sea comestible, con ello se da un aliciente al cliente, se reduce la vajilla que hay que lavar, no hace falta servir pan para la ensalada…
En fin, quien ideara los también denominados taco bowls no lo hizo mal, para algunos, pues ha generado demanda de productos, desde las cestas para freír tortillas mexicanas, al producto ya elaborado y envasado colocado en el lineal del supermercado.
Pero claro, siempre se puede improvisar en la cocina para conseguir lo que con utensilios de cocina específicos se facilita, y en este caso además, se obtiene un resultado más saludable, pues en lugar de freír se va a hornear. Como podéis ver en la foto que ilustra estas líneas, se puede utilizar un molde rígido de magdalenas para hacer cuencos o cestas crujientes con tortillas mexicanas. Los ingredientes, para todos los gustos, de estas recetas con tortillas de maíz fáciles y rápidas ya te los decimos nosotros en este post.
Hacía tiempo que habíamos visto este truco de cocina en Pinterest, pero hoy hemos encontrado un vídeo que muestra cómo hacer un bol de tortilla mexicana y cómo no, hemos pensado en que os puede interesar verlo y así podréis ponerlo en práctica, seguramente este verano, o quizá el próximo fin de semana, queráis sorprender en la mesa con una ensalada servida en una tortilla crujiente.
Ya habéis visto lo fácil que es, simplemente hay que colocar el molde boca abajo y engrasar los espacios en los que se va a colocar cada tortilla (aunque no se muestre en el vídeo, tenedlo en cuenta) o quizá mejor, engrasar ligeramente las tortillas por la parte que va a tocar el molde, así no habrá riesgos de que se peguen y facilitará que se doren y se pongan crujiente.
A continuación se introducen en el horno precalentado a 200º C y se hornea hasta que estén ligeramente doradas y crujientes. Depende un poco del horno y del tipo de tortilla, pero puede tardar unos 10 minutos. Lo ideal es que la primera vez que lo hagáis estéis pendientes para comprobar el tiempo que tarda la tortilla laxa en convertirse en un cuenco crujiente.
Una vez hechas las cestas o bols crujientes de tortilla mexicana ya lo sabéis, a rellenarlos con lo que queráis y a comer.