
El queso Don Crisanto, elaborado en Vilalba (Lugo) y amparado por la Denominación de Origen Protegida San Simón da Costa, ha sido elegido como el mejor queso de España en 2025. Este reconocimiento, otorgado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), lo consagra como el mejor queso madurado de vaca del país, además, ha recibido la mayor puntuación global entre todas las muestras participantes en esta edición. Junto a él, otros cinco quesos procedentes de Toledo, Murcia, Cádiz, Asturias y Cantabria completan el palmarés de unos premios que, por primera vez desde su creación, se conceden de forma anual.
Los galardones Alimentos de España Mejores Quesos 2025 tienen un doble objetivo: promocionar y dar visibilidad a los quesos de mayor calidad del país, y estimular a los productores a seguir apostando por la excelencia. Y no son pocos los que han aceptado el reto: 135 muestras procedentes de todo el territorio nacional se han sometido a un riguroso proceso de evaluación en el que han intervenido paneles de cata especializados y análisis físico-químicos, microbiológicos y de autenticidad de especies.
Los premios impulsados por el MAPA están dirigidos a establecimientos autorizados para la elaboración de quesos en España, que deben acreditar una producción mínima anual (2.000 piezas o 3.000 kilos) y pueden participar con una sola muestra por modalidad. Los quesos admitidos deben ser de elaboración propia y se presentan de forma anónima para garantizar la imparcialidad del jurado.
Las cinco modalidades a concurso son: Queso madurado de vaca, Queso madurado de oveja, Queso madurado de cabra, Queso madurado de mezcla y Queso madurado con mohos o queso azul.
Las muestras se envían al Laboratorio Arbitral Agroalimentario de Santander, donde primero se someten a una valoración sensorial (fase visual y olfato-gustativa), realizada por paneles compuestos por cinco catadores expertos. Los cinco quesos mejor puntuados de cada categoría, siempre que superen los 80 puntos, pasan a una segunda fase, donde son nuevamente evaluados por el conjunto de los catadores. Sólo después de superar también los análisis técnicos se decide el veredicto final.
Los ganadores de 2025: del sabor ahumado gallego al carácter andaluz
Don Crisanto, el gran vencedor de este año, es un queso ahumado de pasta semidura, elaborado a partir de leche de vaca pasteurizada. Representa con fidelidad la tradición quesera de Galicia, y su calidad ha sido reconocida con el premio especial Alimentos de España al mejor queso 2025.
Junto a él, estos son los quesos galardonados en el resto de categorías:
Queso madurado de oveja: Valdehierro Curado, de la DOP Queso Manchego, elaborado por Quesos Cristo del Prado (Madridejos, Toledo).
Queso madurado de cabra: Tío Resti, DOP Queso de Murcia al Vino, de Especialidades Lácteas (Caravaca de la Cruz, Murcia).
Queso madurado de mezcla: Payoyo, de la célebre quesería gaditana Queso Payoyo (Villaluenga del Rosario, Cádiz).
Queso azul (ex aequo): Valfríu, DOP Cabrales, de Francisco Herrero Martínez (Asturias) y Picón Bejes-Tresviso, DOP, de Francisco Javier Campo Campo (Tresviso, Cantabria).

Todos ellos son reflejo del enorme patrimonio quesero que atesora España, con una diversidad de sabores, texturas, técnicas de maduración y matices aromáticos que recorren desde las cuevas del norte hasta los secaderos del sur, pasando por pastos manchegos, sierras andaluzas o valles gallegos.
El Ministerio ha reiterado su compromiso con la promoción de los productos agroalimentarios nacionales, en el marco de su campaña «El país más rico del mundo», una iniciativa que busca reforzar la marca España como potencia alimentaria y gastronómica de calidad.
Los premios Alimentos de España, creados en 1987, han evolucionado para adaptarse a los nuevos retos del sector, y su carácter anual a partir de esta edición es una muestra de la creciente relevancia de este reconocimiento. Los quesos galardonados formarán parte de diversas acciones promocionales y tendrán presencia destacada en la gala oficial que se celebrará en otoño.
En un país con más de un centenar de variedades tradicionales de queso, reconocer la excelencia es también una forma de preservar la cultura, la biodiversidad ganadera y el saber hacer de generaciones. Si alguna vez hubo dudas de que el queso es algo más que un alimento, este premio vuelve a recordárnoslo: es identidad, es territorio y es puro deleite.







