Muchos madrileños y turistas han disfrutado durante casi una década de uno de los espacios gastronómicos más emblemáticos del centro de Madrid: el restaurante Puertalsol. Ubicado en la azotea de El Corte Inglés de la Puerta del Sol, con unas vistas espectaculares del kilómetro cero, el restaurante capitaneado por el chef Alberto Chicote y su socio Pedro Olmedo ha cerrado definitivamente sus puertas el pasado 5 de abril de 2025.
Este cierre no ha sido por falta de éxito. La razón está en las obras de remodelación del edificio de El Corte Inglés en el número 10 de la Puerta del Sol, unas reformas que imposibilitan la continuidad del restaurante. Inaugurado el 12 de julio de 2016, Puertalsol ofrecía una propuesta informal, castiza y sabrosa, basada en la cocina madrileña de siempre, con el sello inconfundible de Chicote.
Durante estos años se convirtió en punto de encuentro para quienes querían disfrutar de buenas tapas, platos tradicionales con un giro moderno y una terraza privilegiada en pleno corazón de la ciudad.
En redes sociales han sido muchas las muestras de afecto y agradecimiento por parte de clientes que lamentan el cierre de Puertalsol, lo que deja claro el impacto que ha tenido este espacio en la escena gastronómica de la capital. Por ahora, no se ha anunciado una nueva ubicación para el restaurante, lo cual sorprende teniendo en cuenta su trayectoria consolidada y su popularidad.
Pero no nos quedamos sin la cocina de Alberto Chicote como nos pasó cuando terminó su tiempo en Nodo. Conviene recordar que Alberto Chicote ya no está vinculado al restaurante Yakitoro, con el que se le relacionaba durante muchos años. En la actualidad, su proyecto más personal y ambicioso es Omeraki, abierto en septiembre de 2022, donde el chef ofrece una cocina creativa y muy cuidada.
Si aún no lo habéis visitado, os recordamos que está situado en el barrio de Chamberí (C/ Duque de Sesto, 27), y que Omeraki representa su visión más libre y expresiva de la gastronomía, sin etiquetas ni límites. Así, aunque Puertalsol se despide del cielo madrileño, Chicote sigue más presente que nunca en los fogones de la ciudad, apostando por una cocina con alma, experiencia y creatividad. El AOVE corre por sus venas.