Una de las cosas fundamentales a la hora de hacer un bizcocho, unas magdalenas o prácticamente cualquier elaboración de repostería, es tamizar la harina antes de mezclarla con el resto de ingredientes. Hablamos de tamizar pero también podemos utilizar otros términos muy comunes en la cocina, como cernir, o descripciones como pasar por un tamiz.
Por si alguien tiene dudas sobre por qué se tamiza la harina u otros ingredientes sólidos y en polvo, como el cacao o el azúcar glas, podéis retomar la lectura de este post, aunque en él explicamos también otros significados del verbo tamizar. Resumiendo, en este caso estamos hablando de airear la harina para conseguir masas más ligeras y esponjosas. Y quien dice harina, dice también el cacao en polvo o el azúcar glas si forman parte de la misma masa, porque todo ayuda para obtener el mejor resultado.
El caso es que para tamizar harina lo más habitual es utilizar un tamizador o sencillamente un colador de cocina, pero hay que decir que en algunos casos se puede ahorrar ese paso, por ejemplo si se va a elaborar la masa en el robot de cocina. Hace unos años que utilizamos la técnica de tamizar la harina con Thermomix, al principio pensábamos que nos estábamos acomodando, que quizá el resultado no sería tan bueno como pasando la harina por un tamiz, pero al final hemos comprobado que no somos los únicos (lo hemos hablado con algunos amigos y lectores) y también que los bizcochos salen igual de bien.
Así que nos ha parecido interesante compartir este truco de cocina con vosotros, por si alguien no lo ha hecho hasta ahora, os explicamos cómo hacemos nosotros para tamizar harina con Thermomix, aunque poco hay que explicar… Simplemente se trata de verter la harina en el vaso, después de comprobar que está bien limpio y bien seco, y poner el robot en marcha, con tapa y cubilete, durante unos segundos a velocidad progresiva hasta llegar a 10. Bastan unos pocos segundos, siempre que se avance en la velocidad de las cuchillas rápidamente.
Si la masa que vais a preparar lleva cacao, azúcar glas, canela u otros ingredientes en polvo, podéis tamizar la harina habiéndolos incorporado también al vaso, pues así también se disuelven los posibles grumos y se separan bien las pequeñas partículas. Después podréis seguir la receta normalmente, si es necesario retirar los sólidos del vaso de la Thermomix, incluso podéis pasarlos por el cestillo para airearlos aún más.
Esperamos que este truco os resulte útil, y esperamos que si tenéis algún otro, no dudéis en compartirlo con nosotros.