El Gogol Mogol es un dulce tradicional de la gastronomía rusa, es una especie de sabayón o ponche de huevo (posset) que se elabora con yemas de huevo y licor principalmente, además de azúcar y zumo de limón o de naranja… conocemos varias recetas. Esta preparación solía tomarse como desayuno o merienda. Con el mismo nombre, la empresa rusa de diseño y marketing KIAN, ha bautizado uno de sus proyectos, el envase inteligente que cuece huevos.
Con este embalaje KIAN ha conseguido aumentar su cartera de galardones, recibió el bronce en los ADCR Awards 2012. Como podéis ver en la imagen, la presentación es como una actualización de un cartón de huevos, pero este envase inteligente ofrece más que la simple función de contenedor de huevos.
Los diseñadores plantean el Gogol Mogol como la solución para las personas que tienen un ritmo de vida ajetreado, y que no por ello se conforman con comer cualquier cosa, es decir, se preocupan por llevar una alimentación saludable. Los huevos son saludables, afortunadamente pasaron de la lista de alimentos poco recomendables, a ser considerados como una interesante fuente de proteína, ácidos grasos, vitaminas…
Con los huevos envasados con el embalaje de KIAN, se ofrece la posibilidad de disfrutar de un huevo cocido recién hecho en cualquier lugar y en cualquier momento. Sobre estas líneas podéis ver la imagen con la que representan la estructura del envase inteligente que permite hacer huevos duros. El huevo está directamente en contacto con el material inteligente, después tiene una membrana que separa este material del catalizador para activar el material inteligente, este catalizador finalmente se cubre con el embalaje, el que da apariencia de un cartón de huevos.
Poner en funcionamiento el contenedor para la cocción del huevo es muy simple, hay una lengüeta y al tirar de ella, el material inteligente se activa, y afirman que en dos minutos el huevo estará cocido y listo para comer.
Estaría bien conocer algunos detalles más, pero no dudamos en que se conocerán cuando este proyecto se haga realidad. Si tiene respuesta, será un producto sobre el que innovar, ¿se podrá llegar a decidir si se quiere hacer un huevo mollet o un huevo duro?