Con bastante retraso, quizá por las vacaciones de agosto, la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) acaba de dar a conocer los datos relativos al IPOD de julio de 2025. Según los datos, el IPOD general se estableció en un 3’79, es decir, cinco décimas más que en el mes de junio y 10 más que en el mes de mayo, marcando una pauta de 5 décimas mensuales de incremento.
Y de nuevo se coloca en primer lugar el repollo en este ranking de las diferencias especulativas de precio, llegando a una diferencia porcentual origen/destino del 829%, es decir, un 218% más que en junio, lo que significa que en el trayecto del campo a la mesa, el precio del repollo se ha multiplicado por 9’29 veces, todo un abuso que se puede considerar pura especulación alimentaria.
El precio medio por kilo de repollo en el campo fue de 0’21 euros, lo que supone una caída de 6 céntimos respecto al mes de junio, y en el mercado, el precio medio por kilo fue de 1’95 euros, 3 céntimos más que en el mes anterior. Como vemos, se amplía el margen de los intermediarios en ambos extremos de la cadena, cuando lo normal es trasladar la reducción de precio del campo al mercado.
El segundo producto destacado en el Índice de Precios en Origen y Destino de los Alimentos son las cebollas, cuya diferencia porcentual origen/destino se estableció en un 553%, lo que supone un aumento de un 87% sobre los datos de junio. En origen, el kilo de cebollas se cotizó a 0’34 euros, lo que supone una caída de 7 céntimos sobre el mes anterior, y en el mercado, el precio medio se estableció en 2’22 euros/kilo, es decir, 10 céntimos menos que en el mes de junio. A pesar de esa reducción de precio para el consumidor, los datos muestran que el precio de las cebollas se multiplicó 6’53 veces en su viaje del campo a la mesa.
El resto de productos destacados en el indicador no superan la barrera imaginaria del 500%, aunque están cerca, la lechuga (495%), los ajos (484%) y las ciruelas (473%). El resto de productos que aparecen en el indicador, berenjenas, pimientos, sandías, melocotones y champiñones, entre otros, se encuentran en diferencias que son razonables, algo que debería ser la tónica habitual de mercado.
Curiosamente y a diferencia de años anteriores, no se ha producido un incremento notable de la diferencia de precio entre lo que se paga en el campo y lo que los consumidores pagamos en el mercado, en cuanto a productos típicos de los meses de verano. Por cierto, las variaciones de precio en muchos productos son cíclicas, podemos observar que en el caso del repollo, en el IPOD de julio 2014 alcanzó una diferencia del 1.070%, en julio de 2015 la diferencia se estableció en un 815%, y si seguimos analizando, comprobaremos que es una tónica que se repite cada año y con diferentes productos, aunque no siempre en el mismo mes.
Pero es cierto que en comparación con años anteriores en el mismo periodo, el mes de julio ha sido comedido y se ha aplicado una retención en las diferencias de precio. Podéis conocer más detalles del Índice de Precios en Origen y Destino de los Alimentos de julio de 2025 a través de la página oficial de COAG.
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