Cómo hacer un Roscón de Reyes para el postre o la merienda, empezando a hacerlo por la mañana

Muchas consultas que nos habéis hecho llegar estos días tienen relación con el Roscón de Reyes, y lo que más nos gusta es la cantidad de personas que se animan a preparar este dulce tradicional en casa, aun sin saber que desde el momento en el que prueben el primer trozo, qué va… desde el momento en el que vean su Roscón de Reyes salir del horno inundando con su aroma toda la cocina y deslumbrando a todas las miradas, sentirán tal satisfacción que ya no habrá vuelta atrás, no sólo volverán a hacer un roscón en breve, sino que lo harán cada año para el Día de Reyes.

Y esto puede suceder tanto si se elabora el Roscón de Reyes con prefermento, como si se hace la receta de la masa directa, es decir, que no hace falta preparar una masa la noche anterior. El título de este post es una de las preguntas que nos habéis formulado, cómo hacer un Roscón de Reyes para el postre o la merienda, empezando a hacerlo por la mañana. Pues bien, os lo vamos a explicar con una de las mejores recetas que podréis probar y con una organización horaria que podéis adaptar a vuestra situación, porque cada uno tiene sus responsabilidades y quehaceres. Lo importante es que veréis que aunque para hacer un buen Roscón de Reyes hacen falta horas, es mucho menos tiempo trabajando en la cocina que de tiempos de reposo.

Por cierto, se tarda lo mismo en hacer un Roscón de Reyes que dos, por eso siempre hacemos masa para dos que, además, salen grandecitos. Simplemente hay que dedicar cinco minutos más a formar el segundo roscón, y el tiempo de horneado será el doble, porque los horneamos por separado, pero ese tiempo no es de dedicación plena, el horno trabaja solo. Además, así hay un roscón para rellenar y otro para comer solo (y es difícil elegir), o un roscón para regalar, que también es un buen detalle.

Así que vamos con la receta para hacer el Roscón de Reyes si queréis organizaros de buena mañana y tener este dulce delicioso para el postre o para merendar. Y lo de adaptaros no os resultará difícil si, por ejemplo, empezáis esta tarde-noche de Reyes a preparar la masa y la queréis hornear por la mañana para disfrutar del Roscón de Reyes recién hecho, para desayunar, ya que la fermentación se puede hacer más lenta y prolongada dejando la masa en la nevera. Empecemos con los ingredientes.

Ingredientes (2 roscones medianos)

Para la masa
  • 150 gramos de azúcar glas
  • piel de 1 limón
  • piel de 1 naranja
  • 130 gramos de leche entera
  • 25 gramos de levadura fresca de panadero
  • 30 gramos de agua de azahar
  • 2 huevos L
  • una pizca de sal
  • 500-550 gramos de harina de fuerza
  • 80 gramos de mantequilla a temperatura ambiente.

Para decorar
  • c/n de naranja confitada
  • c/n de almendra palito o laminada
  • c/n de azúcar
  • unas gotas de agua de azahar.

Elaboración

08:00 h. Preparar todos los ingredientes necesarios, pesados, pelados, rallados… La mise en place facilita cualquier proceso culinario

Es importante tener en cuenta algunos detalles sobre los ingredientes, especialmente sobre la harina, y es que no todas las harinas de fuerza son iguales y no todas necesitan o admiten la misma cantidad de líquido para su hidratación. Por eso es mejor quedarse corto de líquido que pasarse, siempre se puede añadir más harina, así que empezamos con 500 gramos de harina, pudiendo añadir aproximadamente unos 50 gramos más, sin olvidar que esta masa debe resultar bastante húmeda y pegajosa.

Cómo hacer la masa con robot de cocina

Pon la piel de naranja y limón sin albedo (sin la parte blanca) y ponla en el vaso del robot de cocina con el azúcar. En Thermomix programa 30 segundos, Velocidad progresiva 5-7-10 para convertirlo en polvo, si utilizas otro robot de cocina realiza el mismo proceso con sus funcionalidades. A continuación añade la leche y la levadura fresca para disolverla, programa 1 minuto, 37º C, Velocidad 2.

Añade el agua de azahar, los huevos y una pizca de sal. Mezcla 1 minuto, Velocidad 5. A continuación incorpora la harina de fuerza y programa 3 minutos, vaso cerrado, Velocidad espiga. Finalizado este tiempo, incorpora la mantequilla a temperatura ambiente, y vuelve a programar 3 minutos, vaso cerrado, Velocidad espiga. La masa obtenida será fina, elástica y algo pegajosa.

Pon la masa en un bol muy grande para que tenga espacio para crecer, espolvoreado con un poco de harina o untado con un poco de aceite de oliva virgen extra. Cubre la masa con un trapo (que no se lave con jabones fuertes ni suavizante) y deja fermentar a temperatura ambiente (tirando a cálida), en un lugar sin corrientes de aire, hasta que doble su volumen (dos o tres horas).

Cómo hacer la masa a mano

Ralla la piel de naranja y limón y mézclalas con el azúcar. Pon la leche en un vaso y témplala (no debe estar muy caliente) en el microondas, disuelve en ella la levadura fresca batiendo con una cuchara, tiene que quedar totalmente disuelta.

Pon la harina de fuerza en forma de volcán en un bol grande, añade en el centro la leche con la levadura y el azúcar con la piel de naranja y limón. Añade también el agua de azahar, los huevos y una pizca de sal. Bate la mantequilla con una espátula hasta que esté a punto pomada e incorpórala al bol.

Empieza a integrar los ingredientes vertiendo la harina sobre los líquidos y mezclando. Cuando puedas hacer una bola, engrasa ligeramente la mesa de trabajo y las manos con aceite de oliva y vierte la masa para continuar amasando hasta obtener una masa homogénea.

Pon la masa en un bol muy grande para que tenga espacio para crecer, espolvoreado con un poco de harina o untado con un poco de aceite de oliva virgen extra. Cubre la masa con un trapo (que no se lave con jabones fuertes ni suavizante) y deja fermentar a temperatura ambiente (tirando a cálida), en un lugar sin corrientes de aire, hasta que doble su volumen (dos o tres horas).

11:00 h. Formar los roscones

Divide la masa en dos porciones si quieres hacer dos roscones medianos, dan para unas seis raciones. Forma una bola con cada porción y déjalas reposar cinco minutos para que pierdan tensión. Prepara dos bandejas de horno, cúbrelas con papel vegetal o teflón, y coloca la bola de masa encima. Con los dedos, haz un agujero en el centro de la masa y ve abriéndolo cuidadosamente.

Si la masa se encoje después de estirarla para hacer el rosco, déjala reposar unos minutos, habrá perdido tensión y se podrá estirar fácilmente. Ve abriendo el agujero tomando la masa con las dos manos, procurando que quede con el mismo grosor, al ser una masa pequeña será fácil. No olvides meter el ‘rey’ y el ‘haba’.

El agujero debe ser el doble de grande de lo que después se espera en un Roscón de Reyes, porque volverá a crecer con el segundo levado y con el horneado. No somos partidarios de poner un aro de emplatar para evitar que se cierre la masa, nos parece que lo afea bastante (y como el agujero no se come, mejor que haya más roscón 😊). Cubre la masa de nuevo con el trapo para que vuelva a fermentar, déjala unas dos horas o hasta que doble su volumen, en un lugar cálido y sin corrientes de aire.

14:00 h. Hornear el Roscón de Reyes

Enciende el horno a 200º C con calor arriba y abajo. Pinta la masa con el huevo batido y unas gotas de leche, y decora con la naranja confitada y la almendra (o al gusto). Moja el azúcar con el agua de azahar y reparte sobre el roscón las pequeñas rocas que se forman.

Introduce el roscón en el horno a una altura un punto inferior al centro y baja la temperatura a 180º C. Hornea durante 15-20 minutos, pero vigila a los 10 minutos por si se dora demasiado, en este caso, cubre el roscón con papel de aluminio y continúa horneando unos minutos más, sin pasar de los 20 minutos para que no quede seco.

Retira el Roscón de Reyes del horno y deja reposar 10 minutos, después pásalo a una rejilla para que se enfríe y la parte inferior no quede húmeda.

Acabado y presentación

Llegado el postre o la merienda, el Roscón de Reyes está listo para comer, pero si lo quieres rellenar, aquí tienes unos trucos para montar nata bien firme y aquí tienes varias ideas para hacer rellenos originales y deliciosos, trufa, chocolate, turrón, mousse de tiramisú, crema pastelera…. Pero sin rellenar también está exquisito, puedes servirlo acompañado de una taza de chocolate caliente, un café, una infusión o una copa de cava.

Toma nota

Si sobra Roscón de Reyes, la mejor forma de guardarlo y evitar que se reseque es tapándolo bien con film de cocina, lo importante es que no esté al aire. Si no está relleno no hace falta guardarlo en el frigorífico, pero si está relleno sí será necesario.

¡¡¡Feliz Día de Reyes!!!

Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria

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