Huevos rotos con níscalos y jamón ibérico, una receta imperdible para hacer en temporada

Cuatro ingredientes, que podrían ser tres para quienes no les guste añadir unos ajitos picados a las setas, con un buen aceite de oliva virgen extra (sí, sí, AOVE para cocinar) y el punto de sal que a cada uno le guste, y no hace falta más que un buen pan para mojar en estos Huevos rotos con níscalos y jamón ibérico, es una receta imperdible para hacer en temporada, y cuanto antes mejor, porque seguramente os gustará repetirla hasta que se agote esta exquisita seta.

No obstante, también podéis probar con otras variedades de setas, desde los apreciados boletus o ceps (Boletus edulis), a unos champiñones de cultivo hermosos, bien carnosos, pasando por la seta de cardo, o por una variedad de setas frescas, si son silvestres y de temporada genial, pero hay que reconocer que hay setas de cultivo que nos brindan platos exquisitos. Y la idea de romper el huevo sobre los níscalos (u otras setas) salteados es tan o más apetecible que sobre unas patatas, como se elaboran los clásicos huevos rotos, ¿no os parece?

Pues vamos con la receta de estos níscalos con huevos fritos y jamón de bellota, aunque es un plato muy sencillo que la mayoría sabréis hacer, sabemos que entre vosotros también hay personas que se están iniciando en la cocina y necesitan coger ideas e ir practicando las técnicas culinarias desde el principio. Tomad nota.

Ingredientes (4 comensales)

  • 1 kilo aprox. de níscalos o robellones
  • 3 dientes de ajo
  • 4 huevos camperos
  • 100 gramos aprox. de jamón de bellota
  • c/n de sal
  • c/n de aceite de oliva virgen extra.

Elaboración

Limpia los níscalos procurando que no se mojen demasiado, puedes darles con agua y con un paño, un cepillo suave o con las manos, córtalos para asegurarte de que están sanos y de que todos los trozos tienen un tamaño similar para que la cocción sea homogénea.

Pon una sartén grande a calentar con un buen hilo de aceite de oliva virgen extra y cuando esté caliente añade las setas. Saltea unos minutos, añadiendo sal al gusto, que vayan cogiendo color, si te gustan muy hechos baja uno o dos puntos el fuego, para prolongar la cocción un poco más, cuidando que no queden secos, es mejor que resulten carnosos, más sabrosos.

Cuando estén casi a punto, añade los dientes de ajo picados finos y mezcla bien, si lo deseas puedes añadir perejil fresco picado, aunque a nosotros en este plato, con el jamón no nos apetecía, pero es muy habitual ponerle a los robellones. Después de añadir los ajos, en dos minutos estarán listos.

En una sartén con abundante aceite de oliva virgen extra, fríe los huevos como haces normalmente, la yema debe quedar fluida para ‘salsear’ después las setas, cuando se rompa sobre ellas. Prepara el jamón ibérico, simplemente déjalo a temperatura ambiente unos diez minutos.

Acabado y presentación

Sirve en platos hondos los níscalos con unas pequeñas y finas lonchas de jamón ibérico, dispón en el centro el huevo frito con una pizca de sal y reparte un poco más de jamón a su alrededor. ¡Buen provecho!

Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria

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