Hacer la pasta fresca en casa es fácil, económico y generalmente un éxito. Abundan las máquinas para hacer pastas de todas las formas posibles, pero hoy os queremos mostrar este sencillo cortador de raviolis que podemos también encontrar en distintos tamaños y formas.
Tanto el cortador redondo como el cuadrado, están fabricados en aluminio y nos facilita su manipulación a través de un mango de madera, como un tampón. El corte y el sellado ofrecen la particular forma estriada de los raviolis, así podemos ofrecer a nuestros comensales, pasta fresca casera con una presentación tan auténtica como la de la mejor cocina italiana.
La pega de este cortador de raviolis es que puede ser un procedimiento lento a diferencia de los moldes para raviolis que nos permiten hacer 18, 24 o 36 unidades con un solo gesto, pero todo dependerá también del tamaño que queramos dar a nuestros raviolis.
En la cocina de vanguardia es muy habitual que ofrezcan en su carta platos de raviolis que en realidad son sólo una o dos unidades. Pero son raviolis de gran tamaño, convirtiéndose en cantidad suficiente para un aperitivo o un entrante.
A nosotros también nos gusta hacerlos así de grandes, como este Ravioli de setas y su velouté, pero para ello no hemos comprado ningún otro accesorio de cocina, los moldes o cortapastas que utilizamos para nuestras galletas son ideales. Además, seguro que todos tenéis distintos cortapastas con formas lisas y rizadas para poder dar a vuestros raviolis una bonita imagen.
En cualquier caso, si os gusta el cortador de raviolis original, tampoco vais a tener que desembolsar mucho dinero ni robar mucho espacio a vuestro cajón ‘desastre’, según el tamaño, 4, 5 o 6 centímetros, su precio está en torno a los 3 y los 5 euros.