El vending de leche fresca no es algo nuevo en otros países como Suiza o Bélgica, pero sí en España. Hace unos meses se instalaba la primera máquina expendedora de leche de España en la plaza del mercado de la localidad de Elizondo (Navarra).
Se trataba de un nuevo servicio ofrecido por las máquinas expendedoras que había puesto en marcha la explotación ganadera Jauregia de Aniz propiedad de la familia Azkarate.
La idea surgió fruto de un viaje que los responsables de la explotación ganadera realizaron a Italia, allí conocieron las máquinas de vending de leche que funcionaban desde hacía algunos años. Se trataba de una posible salida al excedente de leche de la explotación y decidieron exportar la idea a España.
Las máquinas expendedoras son italianas y presentan una capacidad para 300 litros de leche, tras la pasteurización realizada en el caserío, la leche se introduce en la máquina y se mantiene a cuatro grados. Se repone cada dos días y se garantiza su frescura con los correspondientes certificados y la información sobre cuándo se ha introducido la leche.
Los consumidores simplemente deben colocar su propio recipiente o una de las botellas de plástico y cristal que se encuentran junto a la máquina, tras insertar un euro y pulsar el botón, se obtiene un litro de leche. Quizá pueda parecer excesivo un euro pero dada la calidad y la frescura de la leche es un buen precio.
Ahora ya son dos las máquinas en funcionamiento, recientemente se ha colocado la segunda máquina expendedora o vending de leche fresca en una gasolinera de la localidad de Villava (Navarra). Los resultados obtenidos con la primera, animan a seguir con esta idea fruto de las estrategias comerciales que son necesarias adoptar para afrontar la crisis económica. Como se puede apreciar en la fotografía, la vending de leche no pasa desapercibida, una enorme vaca se sitúa sobre ella diferenciándola del resto de expendedoras.
Quizá en esta segunda máquina lo que choca es la ubicación, de todos modos, en las gasolineras se venden todo tipo de productos y será cuestión de ir acostumbrándose que también puedan ofrecer leche fresca. Posiblemente la idea pueda ser adoptada por otras explotaciones ganaderas y comiencen a proliferar las máquinas de vending de leche.
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