Hoy queremos compartir con vosotros esta receta de Pan de jengibre que siempre solemos preparar por estas fechas, es como una tradición. A veces pasan meses y no nos acordamos de este pan, del que además hacemos distintas variedades (con otras especias, con materia grasa como la mantequilla…), pero siempre a primeros de noviembre nuestra casa se perfuma con el jengibre de este pan.
Esta receta para hacer Pan de jengibre nos la enseñó hace unos años una gran amiga, y nos gusta que también vosotros la conozcáis para que podáis disfrutar de este delicioso y especiado pan, que podéis comer solo, con ingredientes dulces o con salados, tostado… simplemente con un poco de mantequilla te deleitará.
Ingredientes
- 290 gramos de harina de fuerza
- 240 gramos de pâte fermentée
- 1 huevo
- 100 ml. de leche
- 6 gramos de levadura fresca para pan
- 90 gramos de azúcar
- una pizca de sal
- 10 gramos jengibre molido
- 2 gramos de cinco especias chinas
- aceite de oliva.
Elaboración
Disuelve la levadura en la leche tibia y pon todos los ingredientes en el vaso de la amasadora, nosotros la hacemos en la Thermomix. También se puede hacer a mano, haciendo un volcán con la harina e incorporando los líquidos en el centro. Engrásate las manos con aceite de oliva si se te engancha mucho en las manos.
Recuerda que la masa madre o prefermento, deberás hacerla al menos seis horas antes, o si la tenías en el frigorífico, deberás tenerla fuera unas dos horas para recuperar la actividad.
Amasa durante 6-8 minutos, obtendrás una masa elástica, homogénea y algo pegajosa. Unta un molde de cake con aceite de oliva, sin excesos, y pon la masa de pan en él amoldándolo a su forma. Cubre con un paño y deja fermentar hasta que doble su volumen. Nosotros lo hemos tenido unas dos horas.
Precalienta el horno a 200º C con el ventilador o con calor arriba y abajo. Pinta la superficie del pan con aceite de oliva e introduce el molde en el horno. Hornea el pan los primeros diez minutos a la temperatura indicada, después bájalo a 180º C y hornea unos 20 minutos más. Si ves que se tuesta demasiado, cubre el pan con papel de aluminio.
Retira el pan de jengibre del horno y cuando haya perdido un poco de temperatura, desmóldalo y ponlo sobre una rejilla para que se enfríe. Después, a disfrutarlo.