Empieza la temporada de las setas, todavía no nos hemos despedido del verano y ya se han empezado a recolectar las primeras variedades, ceps, pies de rata o rossinyols, setas que se han comercializado en la localidad catalana El Pont de Suert (Lérida) a 30 euros el kilo dada la exclusividad del producto. Además, la semana que viene, esperan recoger los primeros níscalos, variedad de setas también conocida como rovelló, robellón, esclata-sang, mízcalo, hongo royo o ziza gorri entre otros nombres.
Según el Centro Tecnológico Forestal de Catalunya (CTFC), este año se prevé una buena campaña de setas que satisfará a todos aquellos que somos aficionados a su recolección, el centro pronostica una producción de hasta 80 kilos de setas por hectárea (venenosas y comestibles) en el Pirineo y Pre Pirineo catalán, datos que se asemejan a los obtenidos el año pasado, aunque como sabemos, en ocasiones el reparto no se ajusta a la realidad. Por cierto, será interesante consultar las previsiones que ofrece Caçadors de bolets.
Cada buscador de setas guarda celosamente sus lugares de recolección y más cuando pueden encontrar en un área relativamente pequeña de terreno, las suficientes setas como para llenar la cesta. Con respecto a los níscalos, se prevé una producción que rondará los 5 kilos como máximo por hectárea, será cuestión de preparar la cesta y la navaja para setas.
Llega la temporada de setas y con ellas los sabores gastronómicos puramente otoñales, no vemos el momento de iniciar la recolección. Desde hace bastantes años realizamos salidas a la montaña para buscar todo tipo de setas comestibles, desgraciadamente en la zona donde las recolectamos (Fredes) las setas no serán tan madrugadoras y todavía deberemos esperar un mes como mínimo. También tenemos la ventaja de contar con ayuda, uno de nuestros amigos vive en esta localidad y en cuanto aparecen las primeras setas nos avisa para que vayamos a disfrutar de un día magnífico en el que no falta un buen almuerzo.
Hay que decir que aunque se pronostica una buena campaña, los cambios climáticos la podrían truncar como ha ocurrido en años anteriores, el propio CTFC reconoce que resulta difícil y arriesgado realizar este tipo de pronósticos. Los factores medioambientales propicios en los meses de agosto y septiembre darán lugar a una buena recolección de setas en los meses de octubre y noviembre, siempre dependiendo de la zona y su microclima específico.
Ya lo sabéis, si queréis ser los primeros en recolectar setas, en los bosques del Vall d’Aran están empezando a aparecer tímidamente, puede ser una buena oportunidad para conocer la localidad y los montes de Pont de Suert (Alta Ribagorza). Y si no encuentras setas, siempre podrás disfrutar de la gastronomía y los atractivos que ofrece esta ciudad.