Patatas crujientes al puñetazo con pesto de calabaza y ajo asado. Receta saludable e increíblemente deliciosa

De una nueva receta, no es raro que se cree antes la salsa que el que se considere después el ingrediente principal del plato, en este caso las patatas. La cocina es así, de pronto tienes delante una serie de ingredientes que te están pidiendo que los unas, en tu mente ya puedes saborear el resultado y sabes que va a provocar el disfrute de todos los paladares. Así nació nuestro pesto de calabaza y ajo asado con un toque de limón encurtido, especias… es una delicia.

Y este pesto puede formar muchos matrimonios culinarios magníficos, pero con unas patatas asadas con piel, chafadas y vuelta a hornear para que queden muy crujientes, es una exquisitez, así que tomad nota de la receta paso a paso que os dejamos a continuación. Os recomendamos elegir unas patatas bien pequeñitas para servir para que haya al menos cuatro por persona (y habrá quien querrá más). Os van a encantar estas patatas crujientes al puñetazo con pesto de calabaza y ajo asado, y nos confirmaréis que además de sencilla, es una receta saludable e increíblemente deliciosa.

Ingredientes (4 comensales)

  • 600 gramos de patatas de guarnición
  • 1 ramita de cilantro
  • 40 gramos de queso curado ahumado
  • c/n de sal Maldon
  • 30 gramos de aceite de oliva virgen extra (puede ser ahumado).

Para el Pesto de calabaza y ajo asado
  • 500-600 gramos de calabaza
  • 1 cabeza de ajos
  • ½ limón pequeño encurtido
  • 2 ramitas de cilantro
  • ½ c/c de nuez moscada y clavo molidos
  • c/n de pimienta negra recién molida
  • c/n de sal
  • un chorrito de aceite de oliva virgen extra.

Elaboración

Enciende el horno a 200º C. Prepara una bandeja con las patatas previamente lavadas, enteras y con la piel, aderezadas con un poquito de aceite de oliva virgen extra y sal. En la misma bandeja pon el limón encurtido, la calabaza cortada en rodajas de un dedo de grosor aproximadamente, no hace falta pelarla, pero sí lavarla y retirar las semillas, y también pon una cabeza de ajos (puedes poner más para tener este ingrediente preparado para otras recetas) a la que habrás cortado el extremo contrario al nudo, aderezada con AOVE y sal, y envuelta en papel de aluminio, como explicamos e ilustramos en este post.

Baja la temperatura a 180º C y hornea unos 25 minutos o hasta que las patatas y la calabaza estén tiernas y ligeramente doradas, los ajos también estarán asados y tiernos al tacto. Retira la bandeja del horno.

Pon las patatas en la mesa de trabajo y dales un golpe como explicamos en el post ‘Batatas a murro’, puedes chafarlas simplemente con el culo de un vaso, con un mazo de cocina, con un cazo… a continuación, para que resulten más crujientes, puedes volver a ponerlas en el horno, pero en la freidora de aire se hacen más rápido, bastarán unos 6-8 minutos a 200º C.

Para hacer el pesto de calabaza y ajo asado, pon en un bol la calabaza sin piel, los ajos asados, el limón encurtido asado, las hojas de cilantro, las especias, la sal y tritura. Añade al final un chorrito de aceite de oliva virgen extra y vuelve a triturar o mezclar bien.

Acabado y presentación

Sirve en los platos una base de pesto de calabaza, ajo y limón asado, caliente, y coloca encima las patatas crujientes, también calientes. Añade sobre las patatas un poco de sal Maldon y el queso groseramente picado. Termina con el cilantro fresco picado y con un hilo de aceite de oliva virgen extra ahumado (o normal). ¡Buen provecho!

Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria

Artículos relacionados