Ayer se celebró una comida especial no apta para quienes tienen vértigo, los chefs Dani García y Paco Roncero ofrecieron un menú a 50 metros del suelo en Barcelona, en un restaurante móvil suspendido de una grúa. Ya hace bastante tiempo que conocemos la empresa belga Dinner in the Sky, responsable de organizar este tipo de eventos desde hace un par de años, sean reuniones, almuerzos, comidas o cenas, en cualquier parte del mundo.
En esta ocasión, los servicios de la empresa fueron requeridos por la marca de satenes Tefal como acto promocional de los productos que ofrece. La comida congregó a reporteros de diversos medios de comunicación que pudieron degustar las exquisiteces preparadas por Dani García y Paco Roncero. Manitas de cerdo rellenas de boletus y cebolla y Torrijas de coco y fresa fueron los platos elegidos.
Estar suspendidos en el aire y saber que dependes de un cable de sujeción debe provocar una sensación extraña mientras degustas el menú, para quien sea amante de sensaciones de este tipo resultará seguramente muy gratificante. Como podéis ver en la fotografía, el servicio de cocina se encuentra en el centro de la plataforma, y bordeando toda la plataforma se encuentran los comensales debidamente sujetos a las sillas especiales y a unos arnés de seguridad.
Al parecer, el exquisito menú que se estaba degustando o las sartenes que se estaban promocionando no eran el tema de conversación de los comensales ni de los chefs Dani garcía y Paco Roncero, si en cambio las vistas y las sensaciones de las que se podía disfrutar. Por cierto, los asientos de cada comensal son giratorios lo que te permite disfrutar con más plenitud de las vistas.
Dinner in the sky es una experiencia única que se repite en varios lugares del mundo, continuamente se requieren los servicios de esta empresa para ofrecer una comida especial, diferente y original. En esta ocasión es la primera vez que se realiza en suelo español y parece ser que ha tenido muy buena acogida.
La plataforma que funciona como restaurante pesa nada menos que 5 toneladas y una grúa de 120 toneladas se encarga de mantenerla firme a 50 metros de altura. Dependiendo del servicio, en ocasiones también se utiliza otra plataforma anexa en la que un grupo de músicos ambientan tan especial velada.
Los chefs también se encuentran seguros gracias a los arnés de seguridad, aunque hay que decir que si los cuatro cables de sujeción de la plataforma cedieran, esas protecciones de poco valdrían. Por fortuna existen unas medidas y controles exhaustivos que supervisan el correcto funcionamiento y estado de cada uno de los componentes y mecanismos que intervienen en Dinner in the sky.
Para los cocineros fue una experiencia muy divertida y seguramente también para los comensales, a nosotros nos encantaría participar en una experiencia de estas características, ¿y a ti?
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