Asador de pollo vertical

No fue hace mucho tiempo cuando comimos el primer pollo asado en un horno convencional con aires de parecerse a un pollo a l’ast, el pollo asado tradicional de las ‘rostisseries’ de Catalunya, y que muchos sabréis que forma parte de una costumbre dominical, el día de descanso y de reunión familiar, era (y quizá en muchos hogares lo sigue siendo) un clásico encargar un pollo a l’ast, cocinado en una asadora vertical con espetones en horizontal en constante y lenta rotación. El resultado de esta cocción es espectacular, y algo similar se pretende conseguir con el asador de pollo vertical que os mostramos.

La verdad es que el resultado nos gustó, y hemos estado contemplando distintos modelos de asadoras de pollo para uso doméstico, hay para elegir, desde sencillos diseños con materiales de alta calidad (acero inoxidable, hierro fundido…), a modelos más completos, o con distintas particularidades como el infusor central para aromatizar el pollo a la vez que se asa.

Es el que podéis ver en la primera fotografía, fabricado en acero inoxidable, es desmontable y el infusor puede utilizarse siempre que se desee, pudiendo incorporar líquidos, hierbas aromáticas o especias (con este accesorio se evita hacer el pollo sentado en una lata de cerveza que tanta discusión sobre su salubridad ha traído). Es de Norpro, y lo podéis encontrar en Amazon por unos 20 euros.

La misma marca tiene otros modelos que son más sencillos y más económicos, en la parte inferior de la misma página podéis verlos, y también los diseños de otras marcas, pero el otro modelo que queremos destacar es el de Staub.

Esta firma francesa trabaja mucho con el hierro fundido, así que en este caso el precio se dispara, puede rondar los 90 euros, pero es un utensilio que se podrá utilizar de por vida.

En cualquiera de los dos casos, lo que conseguimos al asar el pollo en este recipiente, es que el calor sea homogéneo en todo el contorno del ave, se podrá girar si las condiciones del horno así lo precisan, pero no será necesario para que toda su superficie quede crujiente al no estar en contacto con los jugos, como sucede cuando asamos el pollo en la bandeja, además, el cono central también transmite calor, acelerando la cocción interior.

Una vez que el pollo se ha asado, como en las rostisseries, los jugos que han quedado en la base del accesorio, hay que repartirlo con todos los comensales.

Artículos relacionados